Jesús Vidal
Redacción deportes, 28 abr- El FC Barcelona inicia hoy una semana que puede ser histórica para esta gran institución deportiva española, pues se juega el sábado media liga de fútbol en el Santiago Bernabéu contra el Madrid, y además, el martes y el viernes puede sellar su pase a las finales de las Copas de Europa de Fútbol y baloncesto, y, el domingo, podría ganar esta última.
La fiesta o el llanto comienzan hoy, en el partido de semifinales de la Copa de Europa de Fútbol frente al inglés Chelsea, que viene fortalecido tras eliminar al Liverpool de la competición.
El viernes, las huestes de Xavi Pascual, con Navarro e Ilyasova como principales estiletes, tendrán la ocasión de vencer al todopoderoso CSKA moscovita y plantarse en la final de la euroliga de baloncesto, el próximo domingo, frente a Olimpiacos del Pireo o Panathinaikos.
Y el sábado, la liga de fútbol en juego en la madre de todas las batallas en la casa del eterno rival, el Real Madrid, que espera ansioso ponerse a un solo punto del equipo que hasta hace unas semanas parecía el intocable líder del torneo doméstico.
El Barça, por tanto, está ante una semana en la que puede saborear las mieles del triunfo o llorar las amarguras de la marcha de un tren que pasa pocas veces por la vida de un club.
Redacción deportes, 28 abr- El FC Barcelona inicia hoy una semana que puede ser histórica para esta gran institución deportiva española, pues se juega el sábado media liga de fútbol en el Santiago Bernabéu contra el Madrid, y además, el martes y el viernes puede sellar su pase a las finales de las Copas de Europa de Fútbol y baloncesto, y, el domingo, podría ganar esta última.
La fiesta o el llanto comienzan hoy, en el partido de semifinales de la Copa de Europa de Fútbol frente al inglés Chelsea, que viene fortalecido tras eliminar al Liverpool de la competición.
El viernes, las huestes de Xavi Pascual, con Navarro e Ilyasova como principales estiletes, tendrán la ocasión de vencer al todopoderoso CSKA moscovita y plantarse en la final de la euroliga de baloncesto, el próximo domingo, frente a Olimpiacos del Pireo o Panathinaikos.
Y el sábado, la liga de fútbol en juego en la madre de todas las batallas en la casa del eterno rival, el Real Madrid, que espera ansioso ponerse a un solo punto del equipo que hasta hace unas semanas parecía el intocable líder del torneo doméstico.
El Barça, por tanto, está ante una semana en la que puede saborear las mieles del triunfo o llorar las amarguras de la marcha de un tren que pasa pocas veces por la vida de un club.
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